23/9/12

21 de septiembre de 2011...y se abrió la puerta.



Y sobre las 12 de la mañana se abrió la puerta y allí apareciste tú.

Literalmente hablando aparecimos nosotros en tu mundo y de repente la tierra se detuvo,el tiempo dejó de tener prisa y nuestras miradas se quedaron fijas,conectando por primera vez.

Tus ojos llenos de curiosidad,los nuestros de lágrimas de alegría.El corazón lleno de ternura por verte allí,rodeado de tu mundo al que nos invitaste con la mejor sonrisa.

Minutos que volaron rápidamente y nos envolvieron en una espiral de emociones que aún hoy me hace sentir mariposas en el estómago.
Horas repletas por tu alegría ante la vida.No recuerdo ningún día de mi vida que se me escapara más rápido.
Cuando me quise dar cuenta allí estabas tú,en tu cuna,cerrando los ojos y dando por zanjado el primer día de tu nueva vida,y a la vez el nuestro.

No sé como conseguí dormir aquella noche,cuando cerraba los ojos sólo podía ver tu cara resplandeciente y oler tus abrazos en mi.
Imagino que me dormí pensando que así las horas que nos separaban pasaría tan rápido como las primeras horas juntos.

Al día siguiente se volvió a abrir la puerta y esta vez nosotros ya éramos parte de tu vida.Todo era más fácil y a la vez más complicado.

Tus primeras horas en casa... inolvidables,callado,pensativo,atento a todo,curioso,parecía que ya habías estado aquí.Nuestras primeras horas juntos fueron mágicas,sólos los 3.

365 días después poco queda de aquel niño callado y pensativo.Ahora eres vida pura,curiosidad pura,puro amor concentrado en 90 centímetros.

Ahora ya no habría nada sin tí. En 365 nos has regalado todo,tu vida entera,construyendo tu solito la nuestra a golpe de cariño.

Pienso en muchas ocasiones que aquella puerta que se abrió tenía un hechizo que borró de nuestras mentes todos los recuerdos anteriores para dejar hueco a todo lo que teníamos por delante.

Se abrió la puerta y nació la vida,para tí,para nosotros.

No hay comentarios: